El primero representa a Qatar Investment Authority, un fondo soberano catarí fundado en 2005 con un patrimonio inicial de 100.000 millones de dólares y que en la actualidad vale 450.000 millones. Sané lanza un latigazo desde fuera del área que se cuela al fondo de la red. Sin ningún rubor, el régimen catarí alquiló a sesenta aficionados españoles para que animasen a la selección de su país durante el campeonato.