Cristiano marcó dos goles, aunque el segundo, de chilenita, es el que más se comenta. Los equipos argentinos están limitados por la AFA a tener un cupo máximo de seis jugadores extranjeros, replicas camisetas futbol aunque solo cinco podrán firmar la planilla del partido. El recinto de Ñuñoa es el lugar donde la Roja masculina ha vivido los dos momentos más importantes de su historia: la obtención del tercer lugar en la Copa Mundial de Fútbol de 1962 (máximo logro a nivel mundial), cuando jugó cinco partidos (más el partido de cuartos de final que se disputó en Arica); y la coronación como campeón de la Copa América 2015, el primer trofeo que la selección adulta levantó en su historia, cuando jugó seis partidos como local (incluida la final frente a Argentina). A nivel femenino, la Roja tuvo su primer partido en este estadio recién el 28 de agosto de 2016, cuando enfrentó en un partido amistoso a Uruguay, venciéndolo por un gol a cero.
A partir de esa instancia, Central hizo valer la condición de local ya que las diferencias de gol marcadas en el Estadio Gigante de Arroyito fueron claves para que Central avanzara a las rondas siguientes y conquistara un nuevo título. Llegó una de las sensaciones de la temporada: el delantero rumano Adrian Ilie. Posee una meta o portería, un área penal y otras características similares a la del fútbol tradicional. Dicha temporada se caracterizó por el consecuente relevo generacional del equipo (incluida la salida de Carlos Reinoso al final de la campaña anterior) y la larga racha de 19 partidos consecutivos sin derrota entre las jornadas 17 y 35; lo que curiosamente significó, por la ubicación en el calendario, enfrentar a todos los equipos del máximo circuito sin caer ante ninguno. Aficionado a la vida rural y a las gallinas. Tras su descenso a la Tercera División, ya que en aquella época no existía la Segunda División B, permaneció en ella 28 años, en los que jugó 14 promociones sin lograr el ascenso, siendo en 1965 y 1966 las veces que más cerca se quedó de ascender a Segunda.
Tras la remodelación de la Tercera División en 1970 el Eibar comienza a empeorar en sus clasificaciones hasta que en 1976 cayó a categorías regionales, y no fue hasta 1979 cuando consiguió el ascenso a Tercera División. El pasado mes de noviembre la Comisión Directiva del Consejo Superior de Deportes (CSD) aprobó que los jugadores de los equipos de fútbol de Segunda División B y Tercera puedan lucir la próxima temporada un dorsal fijo y su nombre en la parte posterior de la camiseta. Los tradicionales colores azulgranas del Eibar se originaron en la temporada 1943-1944, cuando la Federación Guipuzcoana de Fútbol cedió a los eibarreses un equipamiento completo del Fútbol Club Barcelona, con cuyos colores comenzó a jugar el equipo. El equipo más ganador fue Colo-Colo quien ostenta 6 títulos bajo esta modalidad, seguido de Universidad de Chile y Cobreloa con cinco y tres títulos, respectivamente. Wikinoticias tiene noticias relacionadas con Selección femenina de fútbol de Chile. ↑ «La leyenda de Ada Cruz, la primera crack femenina del fútbol chileno». ↑ «La Roja femenina igualó ante Colombia en la despedida antes del Mundial». ↑ «La desconocida trastienda de cómo se armó la primera Selección Chilena femenina de la historia».
En basquetbol ganó con Atenas el título de 1935 en primera (junto a Carlos Luis Salas, Néstor Valentín Cambón y José Agapito Aballay) y otros en segunda división. La primera temporada en Segunda División B quedó en sexta posición, y el año siguiente, en la temporada 1987-1988, logró el ascenso a la Segunda División, camisetas de futbol 2023 al quedar primero de su grupo. El equipo acusó notablemente esta baja durante la siguiente temporada. Mientras están en Memphis, durante su tiempo libre, los chicos se dedican a recorrer los enormes almacenes de objetos de segunda mano de la ciudad, y en una de estas excursiones se encuentran con unos cuantos discos de pizarra a setenta y ocho revoluciones por minuto, y entre ellos hay dos que les llaman la atención: uno de Snooky Prior, a quien ya conocen, y otro de Jack Griffin, sobre el que no han oído nunca nada. Cuando iban perdiendo 1-0 en el tiempo de descuento de la final de la Champions de 1999, Teddy Sheringham y Ole Gunnar Solskjær anotaron los últimos goles del encuentro para el triunfo sobre Bayern Múnich, en un partido que es considerado como uno de las mejores remontadas de todos los tiempos.